Venezuela anunció la suspensión del acuerdo de gas con Trinidad y Tobago luego de que Puerto España acogiera un buque de guerra de EE. UU.
Leer más: EE. UU. y China alcanzan acuerdo comercial preliminar
El anuncio hecho el 27 de octubre, expone que las maniobras militares de EE. UU. en Trinidad y Tobago, representan una amenaza para Venezuela.
Frente a esto, Nicolás Maduro notificó la suspensión inmediata de todos los efectos del acuerdo energético establecido entre ambas naciones desde 2015.
“He aprobado la medida cautelar de suspensión inmediata de todos los efectos del acuerdo energético y de todo lo convenido en esa materia. Es una medida cautelar a la cual tengo potestad como presidente y he aprobado y he firmado. ¡Suspendido todo!”, dijo Maduro.
Respuesta de Trinidad y Tobago
La reacción de Venezuela se da tras la llegada del buque USS Gravely DDG-107 en el marco de las operaciones antinarcóticos en el Caribe.
Ante las acciones de la administración venezolana, la primera ministra de Trinidad y Tobago, Kamla Persad-Bissessar, afirmó que su país no cederá a ningún tipo de chantaje político.
“No somos susceptibles a ningún chantaje por parte de los venezolanos en busca de apoyo político. Nuestro futuro no depende de Venezuela y nunca lo ha hecho”, expresó Persad-Bissessar en un mensaje difundido a medios locales.
Recientemente, Trinidad y Tobago recibió la autorización de EE. UU. para explotar un campo en Venezuela muy cerca de la frontera común, pese al embargo vigente desde 2019.

Relaciones en tensión
Aunado a esto, la primera ministra detalló que el USS Gravely estará en Trinidad hasta el 30 de octubre. No obstante, también se le sumará en los próximos días el portaaviones USS Gerald R. Ford, el más grande del mundo.
Todo esto como parte de las operaciones militares ordenadas por el presidente Donald Trump para poner freno al narcotráfico.
Sin embargo, Venezuela no lo ha tomado de la mejor manera. Delcy Rodríguez, miembro del gabinete de Maduro, dijo que la primera ministra de Trinidad y Tobago tomó una “actitud hostil y agresiva contra el país”.

Asimismo, Rodríguez señaló y culpó a dicha nación de sumarse a los planes “guerristas” del gobierno norteamericano.
“Decidió convertir el territorio de este hermano país en un portaaviones de los Estados Unidos, en una colonia militar de los Estados Unidos para prestarse al plan guerrerista contra Venezuela y es una guerra por el petróleo y por el gas”, añadió.
En medio de las tensiones, el gobierno de Trinidad y Tobago reiteró que ningún comentario por parte de Venezuela incide en el desarrollo de la nación. También dijeron que, hasta los momentos, no hay más conversaciones sobre temas energéticos.
Fuente: AFP






