Charlotte, que hasta ahora no figuraba en la lista de ciudades objetivo, se ha convertido en el centro del debate migratorio nacional
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Charlotte enfrenta uno de los episodios de mayor tensión migratoria en su historia reciente tras el despliegue de la “Operación Charlotte’s Web”, una ofensiva federal liderada por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
En solo dos días, las autoridades arrestaron a más de 130 personas, lo que desató temor, cierres de negocios, protestas estudiantiles y un agudo debate político sobre el propósito real de la operación.

Charlotte
La intervención tomó por sorpresa a funcionarios locales y comunidades enteras. Videos de agentes en vehículos sin placas persiguiendo personas en calles y estacionamientos circularon ampliamente, mientras organizaciones como OurBRIDGE suspendieron programas por la presencia de agentes.
Comerciantes, como el panadero Manuel “Manolo” Betancur, cerraron sus puertas para evitar que clientes o familias quedaran atrapados en un operativo que describen como intimidante.
Líderes demócratas de la ciudad, incluida la alcaldesa Vi Lyles, exigieron al gobierno federal respetar derechos constitucionales y denunciaron que la operación busca obtener réditos políticos antes de la elección al Senado de 2026.
Señalan que Charlotte no enfrenta una crisis de delincuencia (los delitos violentos bajaron 20 % este año) y que la ciudad nunca fue mencionada públicamente como objetivo.
El exgobernador Roy Cooper alertó sobre perfiles raciales y sobre el riesgo de separar familias sin debido proceso.
El Partido Republicano estatal, en cambio, celebró la ofensiva.
Afirma que la presencia de la Patrulla Fronteriza responde a una “necesidad real” y culpa a líderes demócratas de permitir una supuesta política de “santuario” que, según su postura, facilita la permanencia de inmigrantes con antecedentes criminales.
Los arrestados están siendo trasladados a centros de ICE en Georgia, ya que Carolina del Norte no cuenta con instalaciones de detención de largo plazo.
Mientras tanto, comunidades Latinas, musulmanas y refugiadas se mantienen en alerta, documentan operativos y organizan redes de apoyo para proteger a vecinos y exigir transparencia.
Charlotte, que hasta ahora no figuraba en la lista de ciudades objetivo, se ha convertido en el centro del debate migratorio nacional.
Fuente: CNN






