Con movimiento, fuerza y una mentalidad positiva, cuidar la postura es más fácil de lo que parece
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Durante años se nos ha repetido que una buena postura significa sentarse erguido, con la espalda recta y los hombros hacia atrás.
Sin embargo, especialistas como el doctor Xand van Tulleken, médico y presentador de la BBC, aseguran que esta idea está desactualizada y que permanecer rígido todo el día puede ser incluso perjudicial.
En su lugar, propone tres claves sencillas y efectivas para mejorar la postura y proteger la salud de la espalda.

Claves
1. Mantente en movimiento
La postura es dinámica, no estática. Permanecer demasiado tiempo sentado o en la misma posición aumenta la tensión muscular y el dolor de espalda.
Lo más recomendable es levantarse con frecuencia, estirarse y variar de postura a lo largo del día. Incluso pequeños cambios, como mover los brazos sobre la cabeza o girar suavemente el cuello, ayudan a liberar tensión.
Aunque las sillas ergonómicas y los dispositivos recordatorios pueden ser útiles, nada sustituye el hábito de moverse con regularidad.
2. Desarrolla fuerza, no rigidez
Una buena postura depende de músculos fuertes, especialmente en la zona del core y la espalda.
No es necesario entrenar intensamente en el gimnasio: bastan ejercicios sencillos, yoga o pilates para reforzar la musculatura y permitir que el cuerpo se sostenga por sí mismo.
El objetivo no es mantener la rigidez, sino ganar flexibilidad y soporte natural.
3. Cambia tu mentalidad
La postura también refleja el estado emocional. Estrés, cansancio o exceso de trabajo pueden traducirse en hombros encorvados o dolores persistentes.
Según Van Tulleken, es importante reconocer que la incomodidad no siempre proviene solo de la posición del escritorio, sino también de factores psicológicos.
Reducir el estrés, equilibrar la agenda y mantener una actitud consciente influyen tanto como los estiramientos.

El Servicio Nacional de Salud británico (NHS) recomienda mantenerse activo y acudir al médico si el dolor de espalda persiste por semanas.
Con movimiento, fuerza y una mentalidad positiva, cuidar la postura es más fácil de lo que parece.
Fuente: BBC
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