Yoga facial: cómo se hace y cuáles son los beneficios

El yoga facial se ha convertido en una técnica natural para mantener el rostro tonificado, reducir líneas de expresión y mejorar la salud de la piel sin necesidad de tratamientos invasivos

Foto cortesía de Nivea

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A diferencia de los productos cosméticos tradicionales, el yoga facial trabaja desde adentro, entrenando y fortaleciendo los más de 50 músculos que componen el rostro.

Esta práctica combina movimientos específicos destinados a ejercitar los músculos del rostro y aunque es similar al yoga corporal, esta disciplina se enfoca en la respiración consciente y el control muscular, pero aplicada a la musculatura facial.

Beneficios

Al practicar yoga facial de forma regular, se pueden observar múltiples mejoras en el cutis tales como:

  • Reducción de arrugas y líneas de expresión
  • Mejor circulación sanguínea en el rostro
  • Mayor firmeza y elasticidad en la piel
  • Alivio del estrés facial y la tensión muscular
  • Aspecto más descansado y rejuvenecido
  • Prevención del envejecimiento prematuro

¿Cómo se hace el yoga facial?

Aunque existe una variedad de movimientos funcionales con grandes beneficios, puedes comenzar con los siguientes:

Recuerda que solo necesitas tus manos limpias, un espejo y unos minutos al día.

Yoga para líneas bajo los ojos

Este ejercicio ayuda a tonificar los músculos debajo del ojo y suavizar las pequeñas arrugas.

  • Relaja el rostro y respira profundamente.
  • Guiña ligeramente un ojo, mientras mantienes el otro completamente abierto.
  • Asegúrate de sentir cómo se contraen los músculos alrededor del ojo.
  • Mantén la contracción durante 1 segundo.
  • Relaja y repite el movimiento entre 20 y 25 veces por ojo.

Adiós patas de gallo

Ideal para suavizar las arrugas en las comisuras de los ojos.

  • Relaja tu rostro y mantén los ojos abiertos.
  • Eleva únicamente los párpados inferiores, sin mover los superiores.
  • Mantén esta posición durante 1 o 2 segundos.
  • Suelta lentamente y repite el ejercicio de 20 a 25 veces.

Activa circulación

Mejora el flujo sanguíneo y da un brillo natural a la piel.

  • Coloca los tres dedos centrales debajo de cada ojo.
  • Tira suavemente hacia abajo para abrir levemente los ojos.
  • Al mismo tiempo, intenta cerrarlos con fuerza.
  • Mantén la tensión durante 8-10 segundos.
  • Descansa y repite el ejercicio cinco veces.

Tonifica los párpados superiores

Este ejercicio ayuda a levantar los párpados caídos y definir la mirada.

  • Usa las yemas de los dedos para levantar suavemente las cejas hacia arriba y hacia los lados.
  • Intenta empujar las cejas hacia abajo, resistiendo el movimiento con los músculos.
  • Mantén la tensión durante 8-10 segundos.
  • Repite 5 veces.

El yoga facial no reemplaza una buena rutina de cuidado de la piel ni hábitos saludables como la hidratación o el descanso, pero puede ser un excelente complemento.










Fuente: Nivea

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