Tras la Navidad, la chimenea sigue siendo clave en la decoración del salón. Un gran espejo sobre la repisa amplía la sensación de espacio y luminosidad
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Decorar la chimenea en Navidad puede transformar por completo el ambiente de tu salón y convertir este rincón en el verdadero centro visual de la casa.
Incluso cuando no la enciendes con frecuencia, su presencia marca la distribución de los muebles y sus posibilidades decorativas la vuelven un lienzo perfecto para crear ambientes cálidos y llenos de personalidad.

Chimenea
Durante las fiestas, la repisa se convierte en un escenario ideal para desplegar creatividad.
Las guirnaldas navideñas, ya sean artificiales o elaboradas con ramas naturales de pino o eucalipto, aportan frescura y un aroma festivo.
Puedes añadir piñas, cintas o pequeñas bolas decorativas para intensificar el carácter navideño.
Los clásicos calcetines colgados siguen siendo un acierto, y personalizarlos con nombres o iniciales agrega un toque único.
En espacios más modernos, funcionan muy bien los tonos neutros o metálicos.
Las velas, tanto tradicionales como LED, suman calidez inmediata. Colocarlas en grupos sobre la repisa o combinarlas con candelabros de metal o madera ayuda a reforzar la sensación acogedora.
Además, una corona en la pared, elaborada con frutos rojos o ramas verdes, aporta un elemento visual que jamás pasa de moda.
Si buscas un efecto más llamativo, puedes incluir marcos o guirnaldas de luces LED alrededor de la chimenea para resaltar su silueta y crear un fondo perfecto para fotos familiares.
Tras la Navidad, la chimenea sigue siendo clave en la decoración del salón. Un gran espejo sobre la repisa amplía la sensación de espacio y luminosidad.
También funcionan muy bien los marcos con láminas intercambiables, plantas pequeñas, esculturas, jarrones y libros.
Mantener la leña a la vista, ya sea en cestos o dentro de la propia chimenea, suma un toque rústico atractivo.
En primavera y verano puedes usar flores y tonos frescos, mientras que en otoño destacan los elementos naturales como hojas secas y ramas.
De esta forma, la chimenea se adapta a cada estación sin perder protagonismo.
Fuente: Infobae






